Cassandra
Wilson es una cantante de jazz estadounidense, compositora y productora nacida
en Jackson, Mississippi. Ha sido definida como una cantante bendecida con un
timbre y una fuerza inconfundible que ha expandido su interpretación mediante
la incorporación de blues, country, y música folk en su trabajo. Empezó a tocar el piano y la guitarra a los nueve años
y trabajó como vocalista a mediados de los setenta, interpretando una amplia
gama de material.
Tras un año en Nueva Orleans, Wilson se trasladó a Nueva York en
1982 y empezó a trabajar con Dave Holland y Abbey Lincoln. Tras conocer a Steve Coleman, se convirtió en la principal vocalista del M-Base Collective.Aunque no había realmente sitio para una cantante en
los conjuntos de free funk, realizó un buen trabajo en la medida de sus
posibilidades.
Trabajó con New Air y grabó su primer disco como líder en 1985.Tras unos discos sin excesiva repercusión,
Cassandra cambió de dirección e interpretó un programa acústico de tipo
blusístico para Blue Note llamado Blue Light 'Til Dawn.Siguiendo la estela de este trabajo, con el que Wilson
había encontrado su estilo, siguió interpretando música de fusión plenamente
creativa, entre jazz, el blues, el country y la música folk, y ha llegado incluso a
aproximarse a las técnicas del hip hop en su trabajo de
2006 Thunderbird.
El despertar de la musa
de Javier Paco Miró
No
aminora la mañana, tú mansa pereza,
la intensidad;
del sol que excita turgente
a
todas las hormonas.
Solo tu luz emana vibraciones en el viento al
despertar.
Tu
disipas vapores en los cristales suspirando
breves
indicios del día, que la brisa fría empaña.
Deja
el roció de reinar sobre los pastos.
Dejas
abrir los pétalos como tus parpados.
No
aminoran la marcha, rojos pezones de abandonar,
el
cálido refugio tenue que tu blusa apaña.
Sueltas
tus huesos libres desperezando.
Surge
vida esfumada en rincones lejanos.
Se
hace presente el deseo, caricia extraña.
No
es la lenitiva resaca la que mide el tiempo,
a
tu pesar,
sino
el tirano reloj y sus agujas furtivas,
brindando
la urgencia.
No
restringen los pájaros su dulce trino ni tu gemir,
Bluesman
sueco, seguramente el más versátil del género en su país. Cantante, compositor,
armoniquista y guitarrista, nació en Skärblacka el 28 de marzo de 1952 y
falleció en Estocolmo el 18 de diciembre del año 2016. Desde muy pequeño se
tomó seriamente la música dando sus primeros conciertos en la escuela inicial a
los siete años de edad.
"No sabía ninguna palabra
real en inglés y en realidad no podía tocar ningún instrumento, pero mi abuela
me había comprado una guitarra acústica con la que me engañaba tratando de
imitar a Elvis Presley. El primer artista negro que escuché
fue Little Richard y casi me volvió loco con su canto salvaje y frenético”.
En
1964 escuchó por primera vez a Mick Jagger tocar la armónica y más
tarde a Sonny Boy Williamson (Rice
Miller) y eso lo hizo comenzar. "The
Blues activó algo en mí y todavía me conmueve. Para empezar, la armónica fue mi
instrumento principal. No empecé a tocar la guitarra en serio hasta los 24
años”.
La
primera banda de blues, Telge Blues, se formó en 1972 y duró lo suficiente
como para que la compañía discográfica Phillips se interesara lo suficiente
como para lanzar un álbum en 1975.
Hoy,
muchos álbumes después, Sven no ha perdido interés en tocar o grabar y dos de
sus álbumes, "Blues from inside" y "Let me over over it"
fueron nominados para un Grammy en Suecia.
Hoy,
desafortunadamente, las reglas han cambiado para que ningún CD de blues pueda
competir con otros tipos de música en Suecia.
Sven
nunca se arrepintió de haber dejado su trabajo como conductor de furgonetas de
reparto para el servicio postal sueco en 1985 para convertirse en músico a
tiempo completo y está constantemente tocando y grabando. Su canto y
ejecución a lo largo de los años han dado como resultado un estilo
inconfundiblemente original que es suyo. "Hago mucho blues" en vivo
", pero también incluye material de soul profundo, originales y soul
clásico.
Hay
gente que excede una sola vida, que parecería haberse clonado para poder
abarcar tan inmenso territorio, en este caso literatura, poesía, música,
militancia, revolución, dentro de la música se movió en territorios amplios del
blues, jazz, soul con delicado equilibrio, buen gusto, y de paso ser uno de los
pioneros del rap. Se llamaba Gilberto, le decían Gil, pero de gil no tenía un
pelo.
Gilbert
Scott-Heron, (Chicago, Estados Unidos, 1 de abril de 1949 – Nueva York, Estados Unidos, 27 de mayo de 2011) fue un poeta y músico, principalmente
conocido a finales de la década de los´60 y principio de los años´70 por sus actuaciones de poesía cantada y
hablada, relacionadas con los activistas afroamericanos. Fue famoso por su
poema-canción: The Revolution Will Not Be Televised.
Nació en Chicago, Illinois, pero pasó su infancia
en Tennessee y más tarde se
mudó al Bronx, donde cursó sus estudios secundarios. Tras
estudiar por un año en la Lincoln University en Pensilvania, se mudó
a Londres para probar nuevos horizontes en donde publicó su primera
novela, The Vulture, que fue bien recibida. Empezó su carrera musical
en 1970 con el LP Small Talk at
125th and Lenox. El álbum incluía diatribas agresivas contra los medios
corporativos manejados por los blancos, la superficialidad de la televisión y el consumismo, y la ignorancia de la clase media de los Estados Unidos sobre los problemas de las ciudades del
interior en canciones tales como Whitey on the Moon.
La
banda Mexicana Molotov hizo un cover de su canción The
Revolution Will Not Be Televised.
A
pesar de sacar algunos álbumes, su éxito más grande llegó en 1978 con la canción
«The Bottle». Scott-Heron es a menudo visto como uno de los padres fundadores
del rap. Murió el 27 de mayo de 2011. Aún no se han
revelado las causas de su deceso. En el momento de su muerte, se supo que
era VIH-positivo.
La revolución no será televisada
No te podrás quedar
en casa, hermano.
No podrás conectarla, encenderla y apagarla.
No podrás perderte en la heroína y evadirte,
ni evadirte por una cerveza durante los anuncios,
porque la revolución no será televisada.
La revolución no será
televisada
La revolución no te será traída por Xerox
en cuatro partes sin interrupciones de anuncios.
La revolución no te mostrará imágenes de Nixon
soplando una corneta
y encabezando una
demanda contra John Mitchell,
el General Abrams y
Spiro Agnew con tal de comer
morcillas confiscadas a un santuario de Harlem.
La revolución no será
televisada
La revolución no te será traída por la
Schaefer Award Theatre, ni por las estrellas
Natalie Woods y Steve
Mcqueen o Bullwinkle y Julia.
La revolución no traerá a tu boca sex appeal.
La revolución no te deshará los nudos.
La revolución no te hará verte casi tres kilos más delgado,
porque la revolución
no será televisada, hermano.
No habrá fotos tuyas
y de Willie May
empujando ese carrito de la compra calle abajo
huyendo desesperadamente
o intentando colocar esa televisión a color
en una ambulancia robada.
NBC no podrá predecir el ganador a las 8:32
o informar desde 29 distritos.
La revolución no será televisada.
No habrá imágenes de
los cerdos abatiendo
a sus hermanos en la repetición de la jugada.
No habrá imágenes de los cerdos abatiendo
a sus hermanos en la repetición de la jugada.
No habrá fotos de Whitney Young
siendo arrastrado
más allá de Harlem
en un tren con un nuevo
proceso de marcado.
No habrá cámara lenta o naturaleza muerta de Roy Wilkins
paseando por Watts en
un liberador mono
rojo, verde y negro que había estado guardando
esperando la oportunidad idónea.
Green Acres, The Beverly
Hillbillies y Hooterville Junction
ya no serán tan jodidamente
relevantes,
y a las mujeres no
les importará
si Dick fue al grano
con Jane en Search for Tomorrow
porque los negros estarán
en las calles
en busca de un día más
brillante.
La revolución no será televisada.
No habrá lo más destacado
en las noticias de las once
y no habrá imágenes
de peludas mujeres liberacionistas armadas
y Jackie Onassis sonándose
la nariz.
La canción principal no será escrita por Jim Webb o Francis Scott Key,
ni cantada por Glen
Campbell, Tom Jones, Johnny Cash,
Englebert Humperdunk, o
los Rare Earth.
La revolución no será televisada.
La revolución no tendrá
vuelta atrás
después de un mensaje sobre tornados blancos,
relámpagos blancos o gentes blancas.
No tendrás que preocuparte por una paloma en tu dormitorio,
un tigre en tu cisterna,
o el gigante en el retrete.
La revolución no marchará mejor con Coca-Cola.
La revolución no luchará contra los gérmenes
que pueden causar mal
aliento.
La revolución te pondrá en el asiento del piloto.
La revolución no será
televisada, no será televisada,
no será televisada, no será televisada.
La revolución no será re-emitida, hermanos;
la revolución será en vivo.
Ryan
McGarvey es una estrella en ascenso. En los últimos años, sus elogios han
incluido ser seleccionado por Eric Clapton de más de 4.000 artistas de todo el
mundo para actuar en su Crossroads Guitar Festival 2010 en Chicago, al Premio
Anual Readers Choice de la revista Guitar Player por "Mejor Nuevo
Talento" en 2013. 2014 resultó ser otro año épico para McGarvey, ya que
votó al ganador del "Mejor guitarrista" en los European Blues Awards. Ryan
está constantemente de gira internacional, y graba cuando el tiempo lo permite.
Su
guitarra incendiaria, pero dinámica, deja a las multitudes de todo el mundo
maravilladas y con ganas de más. Con canciones fuertes, voces
galardonadas, una guitarra feroz, una ética de trabajo imparable y un amor
eterno por el hard rock con sabor a blues que vierte desde su alma, Ryan ha
sido comparado con los mejores en el negocio. Ryan McGarvey, aunque ya es
un profesional experimentado, tiene un futuro brillante por delante que acaba
de comenzar…
Según Joe Bonamassa: “Conocí a Ryan en 2006 y quedé muy
impresionado por la profundidad de su influencia y su capacidad para poner
dichas influencias juntas a su manera ... Verlo crecer como artista y escuchar
su nombre mencionarme tanto como es un testimonio de su arduo trabajo y habilidad”.
Nació el 30 de octubre de 1986 en Albuquerque, Nueva México, influenciado
artísticamente porJimi Hendrix, Stevie Ray Vaughan y el propio Bonamassa ha
logrado diseñar su propia arquitectura musical son riffs a los cuales se los puede calificar
de épicos, tan brutales como maravillosos.
De todos modos sabemos que somnis imago
mortis, el sueño es la imagen de la muerte. Cualquier cosa que haga contempla
la muerte, destalló acertadamente Séneca, para luego agregar, es más cruel
tenerle miedo a la muerte que morir, planteados los términos lamento disentir
con Umberto Eco cuando en el Nombre de la Rosa metaforiza “La muerte es el
descanso del viajero, el fin de todos los trabajos”. Ciertamente, en nuestro
caso, y por el carácter prematuro del suceso no existe cansancio de vida ni
fatiga laboral alguna, incluso, y a favor de su consulta, existen un par de
manuales sobre el arte del buen morir titulados Ars Moriendi, escritos en la
primera mitad del siglo XV, en ellos de detallan protocolos y consejos para
llegar de buen modo a ese recodo de la vida – sentenció Isa, el Cristo Profeta
del Islam -