Nació el 28 de noviembre de
1947 en Sarasota, Florida, EE.UU. Tras acompañar durante un lustro muy exitoso
a Stevie Ray Vaughan & Double Trouble, grabar con infinidad de artistas
como Buddy Guy, Bob Seger, Lou Ann Barton, Joe Louis Walker, Tab Benoit y John
Hiatt, y sumarse como miembro estable de la banda de Joe Bonamassa, este
tecladista de Blues acaba de lanzar su primer álbum solista. Wynans construyó
su carrera como sideman, aportando desde las teclas lo necesario para
jerarquizar los discos o shows de otros grandes artistas. Y ahora llegó su
momento de dar un paso al frente, aunque lo hizo como siempre, desde su lugar y
dejando que otros brillen.
Fuente: http://malbecblues.blogspot.com/
Maneras de escuchar un blues
de Vicente Gallego
Es hermosa esta noche de verano,
aunque no más hermosa
que cualquier otra noche de verano.
Es hermosa esta noche en la que estoy solo,
y fumo y he dejado en penumbra la casa
mientras sueña un dulce y
triste blues,
un blues tan triste y dulce como otros.
Nada en mí, ni en la noche, ni en la música,
se diría especial,
un blues tan triste y dulce como otros.
Nada en mí, ni en la noche, ni en la música,
se diría especial,
y sin embargo existe algo muy
hondo
en esas cosas que parecen
sencillas:
una extraña grandeza que no acaba
de ser exaltación, tragedia, paz,
pero que es todo eso,
una extraña grandeza que no acaba
de ser exaltación, tragedia, paz,
pero que es todo eso,
y es también un sentir
claramente
que para que esto ocurra
que para que esto ocurra
ha sido necesario apurar estos
años,
acumular recuerdos, haber
ganado
y haber perdido tantas cosas.
Para que este piano suene así,
para temblar así con esta música,
ha sido necesario
ir llenándola poco a poco
de belleza y de daño, ir llenándola
con nuestra propia vida, para que se parezca
a nuestra propia vida, y suene así:
tan insignificante
y tan grande, tan triste, tan hermosa.
y haber perdido tantas cosas.
Para que este piano suene así,
para temblar así con esta música,
ha sido necesario
ir llenándola poco a poco
de belleza y de daño, ir llenándola
con nuestra propia vida, para que se parezca
a nuestra propia vida, y suene así:
tan insignificante
y tan grande, tan triste, tan hermosa.
Preciosas letras...
ResponderEliminarSon necesarias tantas cosas para que algo salga bien...
Muchos besos, Javier.