El amor es el único delito que merece
reincidencia,
y digo delito y reafirmo pecado.
Su purgatorio, el corazón, no conoce de
sentencias
no padece de aguijones, de condenas
transitorias
ni de comas ni de amnesias.
Ustible delito del pasajero abreviado
es sortilegio cercano, olvido del distante,
alegato lascivo y muerte en un instante.
Relapso, obstinado, apóstata quimérico
ausente del después y presente en su perjurio
ególatra indolente con fueros de preludio
espectro, Dios y padre
mercedario de lo turbio.
Aún así, desnudo, marchito y obsecuente
insto fervorosamente a reincidir,
el más bello de los delitos concebidos
cruel dogma con el cual he sido herido
me arroja sin rubor hacia tu pecho
con el arma y el más cruel de los deseos
como adicto que imagina delinquir.
Como nos tiene acostumbrados...Una joya el poema.....Y muy bien elegido el blues "de la reincidencia"...
ResponderEliminarTambien es enfermedad
ResponderEliminarQue merece recaida
No hay hospital que lo admita
Ni Doctor que se le arrime
Otra vez 10 en Poesia Gustavo !! que golazo